jueves, 27 de diciembre de 2007

Manipulando la Historia (y las mentes)


Ya lo había anunciado Lord Acton en su día: "La nacionalidad no aspira ni a la libertad ni a la prosperidad, sino que, si le es necesario, no duda en sacrificar ambas a las necesidades imperativas de la construcción nacional". La historia está repleta de abundantes ejemplos y estoy convencido de que coincidirán conmigo en que no es preciso remontarse a tiempos remotos o distantes lugares para encontrarlos.